Los temnospóndilos son un grupo de anfibios muy diverso, datado de entre mediados del Carbonífero e inicios del Cretácico. Solían tener cráneos con una forma triangular bastante aplanados, con los ojos situados en la parte superior de la cabeza, detrás de las fosas nasales.
Características[]
La mayoría de los temnospóndilos eran mayores que los anfibios modernos, con un tamaño medio de aproximadamente un metro, a pesar de que su tamaño variaba entre los 10 cm y los 9 metros. Los temnospóndilos eran generalmente paticortos, exceptuando las formas terrestres. Esto se debe a que es más fácil desplazarse por el agua que por tierra.
Algunos géneros tenían características específicas, como Platyhystrix, que poseía una vela dorsal; Cacops, que poseía placas óseas; Aphaneramma, que vivía en el mar o Gerrothorax, que retenía las branquias en la vida adulta.
Los temnospóndilos se reproducían básicamente como los anfibios modernos, depositando los huevos en el agua con reproducció externa, es decir, los machos y las hembras no se apareaban, simplemente dejaban los huevos y el esperma en el agua para que los huevos se fertilizen. No se han dado casos de tipos de reproducción más extrañas, como las que se ven en algunas ranas modernas.
Historia evolutiva[]
Los diferentes hallazgos de temnospóndilos alrededor del mundo y en diferentes épocas nos dan una idea bastante clara sobre la historia de estos anfibios.
Orígenes[]
Los primeros temnospóndilos verdaderos aparecen a mediados del Carbonífero, hace 130 millones de años. Sus ancestros podrían ser los colostéidos, anfibios de patas cortas y cuerpo alargado, tales como Crassigyrinus. Unos de los primeros géneros son Balanerpeton y Dendrerpeton, que se asemejaban bastante a los reptiles.
Carbonífero[]
Durante el Carbonífero, los temnospóndilos no eran especialmente abundantes, y sus formas no estaban tan diversificadas como en el Pérmico. La mayoría eran seres de patas cortas con cráneos triangulares y aplanados, que se arrastraban por los pantanos en busca de comida, que podía ir desde peces a insectos gigantes. Algunos géneros conocidos de esta época son Eryops y Cochleosaurus.
Pérmico[]
Los temnospóndilos acabaron realmente bien el Carbonífero, aunque no eran los anfibios dominantes por aquel entonces, ya que era obvia la supremacía de los lepospóndilos. Durante el resto del Pérmico inferior, los temnospóndilos eran seres mayoritariamente terrestres, tales como el extraño Platyhystrix, pero persistían algunos géneros carboníferos, como Eryops.
En el Pérmico medio, los temnospóndilos terrestres comenzaron a desaparecer, y los acuáticos o semiacuáticos se hicieron muy abundantes. Algunos de ellos crecieron hasta un tamaño desmesurado, en especial el enorme Prionosuchus, de 9 metros de largo.
Fue al final del Pérmico cuando los temnospóndilos acuáticos prosperaron más, en especial las formas similares a cocodrilos, como Uralerpeton, Saharastega o Rhinesuchus, por mencionar algunos. Fue al terminar el Pérmico cuando la diversidad de temnospóndilos cayó en picado. El evento de extinción del Pérmico superior borró del mapa a la mayoría de temnospóndilos del hemisferio norte, que no reaparecerían hasta el Triásico medio. Al parecer, la supervivencia de los anfibios en el sur estuvo relacionada con la erupción de las trampas siberianas, en el hemisferio norte.
Triásico[]
Tras la extinción masiva del Pérmico-Triásico, los anfibios temnospóndilos se expandieron lentamente hacia el Norte, ocupando la mayoría de ríos, lagos y pantanos del mundo. Muchos géneros tenían una cabeza bastante más redondeada que la de los temnospóndilos pérmicos, ejemplo que se puede ver en Compsocerops y Apachesaurus, aunque persistían los temnospóndilos más típicos del Pérmico, como el Mastodonsaurus, con unos enormes caninos; o el Paracyclotosaurus.
A inicios del Pérmico, un grupo de temnospóndilos se adaptó a vivir en el mar, los trematosáuridos, que se asemejaban a cocodrilos. Estos animales seguían teniendo que reproducirse en agua dulce porque los huevos morían en el agua salada.
Los temnospóndilos prosperaron a lo largo del Triásico, hasta que la extinción masiva del Triásico-Jurásico acabó con casi todos los temnospóndilos, quedando solo los braquiopoideos.
Jurásico y Cretácico[]
Koolasuchus, el último género de temnospóndilo
Los temnospóndilos jurásicos estaban prácticamente extintos. Uno de los pocos géneros sobrevivientes fue el Siderops, hallado en el sur de Australia. Se sabe que los cocodrilos empezaron a prosperar por todo el mundo en el Jurásico inferior, por lo que los temnospóndilos quedaron relegados a los hábitats en los que los cocodrilos no podían vivir, los polos. Sobrevivieron así hasta inicios del Cretácico, cuando el último género conocido, Koolasuchus, se extinguió sin razón aparente.
Taxonomía[]
- Amphibia
- Temnospondyli
- Edopoidea
- Edopidae
- Cochleosauridae
- Dendrerpetontidae
- Dvinosauria
- Trimerorhachidae
- Eobrachyopidae
- Tupilakosauridae
- Eryopoidea
- Eryopidae
- Parioxydae
- Zatrachydidae
- Dissorophoidea
- Amphibamidae
- Branchiosauridae
- Dissorophidae
- Micromelerpetontidae
- Trematopidae
- Archegosauroidea
- Actinodontidae
- Archegosauridae
- Intasuchidae
- Peltobatrachidae
- Lapillopsidae
- Rhinesuchidae
- Lydekkerinidae
- Mastodonsauroidea
- Mastodonsauridae
- Heylerosauridae
- Sclerothoracidae
- Trematosauria
- Trematosauridae
- Thoosuchidae
- Metoposauridae
- Latiscopidae
- Laidleriidae
- Plagiosauridae
- Brachyopidae
- Chigutisauridae
- Indobrachyopidae
- Rhytidosteidae
- Edopoidea
- Temnospondyli
Relación con los anfibios modernos[]
Se cree que los temnospóndilos pueden ser los ancestros de los anfibios modernos (Lissamphibia), pero no es un hipótesis probada. Se conocen lisanfibios del Triásico inferior, un momento en el que los temnospóndilos estaban en decadencia. La hipótesis se basa en la forma del cráneo de los primeros lisanfibios, que era aplanada, unas patas cortas y una cola que presenta semejancias con la de los anfibios modernos. Se cree que el género Gerobatrachus podría ser el ancestro directo de las ranas, pues se asemejaba bastante a una.